Fe en Dios es derechos naturales y una verdad moral incuestionable. Sin embargo, no hay libertad de creencia en China. El gobierno chino Intenta eliminar por completo las creencias religiosas para erigir un país ateo, y lanzó operaciones atraparos  a gran escala contra las personas que creen en Dios. No importa de donde escape, hay los ojos del Partido Comunista para vigilar. Los cristianos chinos hay un peligroso para ser rastreados, para ser envía a la cárcel y para soportar crueles torturas en cualquier momento.